Irene Urdangarin se toma un año sabático y decide no ir a la universidad

Hasta hace solo unos meses, todos pensábamos (y ella también) que el futuro de Irene Urdangarin, tras cumplir su mayoría de edad y graduarse, estaría en la universidad. La hija menor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin tenía claro cuáles eran sus intereses: unos estudios enfocados a la dirección y administración de empresas en el mundo de la hostelería, en concreto en la prestigiosa École Hôtelière de Lausanne (Suiza), lugar en el que reside la joven.

Sin embargo, la vida de Irene Urdangarin ha dado un giro de 180 grados, ya que, según cuenta la revista ¡Hola!, ha decidido tomarse un sabático. Una decisión difícil pero a la que se enfrenta con ganas y entusiasmo. Al igual que hizo su hermano Juan, Irene se pondrá la mochila de cooperante para formar parte de un proyecto como voluntaria. De esta forma no solo vivirá un año de maravillosas experiencias, sino que conocerá mundo y tendrá tiempo para decidir qué es lo que realmente quiere estudiar.

El año sabático de Irene Urdangarin

La sobrina del rey Felipe VI ha heredado de su familia esa voluntad religiosa de ayuda al prójimo, y según explica la misma información, Irene Urdangarin maneja varios destinos: India, Mozambique y Camboya. Otra de las posibles causas de esta decisión sería que desee alejarse del ruido mediático y acumular nuevas experiencias antes de comenzar la universidad.

Esta decisión afecta directamente a su madre, la infanta Cristina, que, al igual que les ha sucedido a los reyes Felipe y Letizia, se quedará sola en Suiza. No podemos olvidar que, además de Irene, Juan vive en Gran Bretaña, Miguel se encuentra haciendo un máster en Londres, mientras que Pablo continúa con sus estudios (y con el balonmano) en España.

Una joven muy discreta

A pesar de llevarse bien con su prima Victoria Federica, Irene Urdangarin no tiene nada que ver con ella ni con su estilo de vida. Y mucho menos piensa en dedicarse a ser influencer. Todo lo contrario, la hija menor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin siempre ha tratado de alejarse de las polémicas de su padre, de su romance con Ainhoa Armentia y el consiguiente divorcio de la infanta, y que influyeron en su rendimiento académico. Irene Urdangarin sigue siendo, en efecto, una joven extremadamente discreta.

La nieta de la reina Sofía es una apasionada del arte y habla varios idiomas a la perfección, como el inglés y el francés. También habla español, catalán (este no tan bien como sus hermanos, pues ella tuvo que trasladarse a Washington muy pequeña) o el alemán. Aunque le gusta la moda, no es un campo al que quiera dedicarse. 

El cambio que ha dado Irene Urdangarin llama la atención y sorprende por los esfuerzos que había puesto la joven en lograr el acceso a la mejor escuela de hostelería del mundo.