De Coco Chanel a Victoria Beckham. La camisa en su versión más clásica la defienden iconos de la moda desde que la mujer empieza a desarrollar un gusto por vestirse más allá del entorno laboral. Y que nos perdone Coco, pero hay vida más allá de la básica camisa blanca, y Victoria lo sabe.
"Ante la duda, todo queda bien con una camisa blanca". La diseñadora británica es una defensora empedernida de esta esta eterna prenda perfecta para formular cualquier estilismo, y cuánta razón tiene. Pero desde hace varias temporadas, la industria está viviendo una evolución de este básico por excelencia:la camisa cuanto más complicada sea en cuanto a diseño, mejor.

La firma italiana Ganni o la española Paloma Wool son algunos de los nombres que en la actualidad apuestan por la creación de camisas que aporten más que elegancia al outfit para inundarlo de arte y personalidad. Y precisamente estas son las apuestas de las prescriptoras de estilo que llevan varias semanas viajando de Fashion week en fashion week presumiendo de vestidor. Todas han metido una camisa en su maleta con un denominador común: el de provocar emociones.