Karlie Kloss celebra su boda ocho meses después

Karlie Kloss ha sabido aprovechar la magia de la noche más larga del año para celebrar por fin su matrimonio con Joshua Kusnher, ocho meses después de darse el 'Sí, quiero' oficial.

Aún no nos hemos olvidado de las preciosas fotos que compartieron el 18 de octubre cuando celebraron una boda íntima en Nueva York, con la promesa de celebrarlo más delante con su círculo de amigos. Y ha sido el 23 de junio el día elegido para cumplirla.

'Wild Wild West'

Karlie y Joshua han hecho una celebración temática, inspirada en el 'Salvaje Oeste', rodeados de amigas y amigos, de la que te vamos a mostrar todos los detalles.

Durante un fin de semana lleno de bodas de famosos, <strong>Maria Pombo</strong>como la de Maria Pombo, la modelo y el empresario reunieron a sus mejores amigos entre los que se encontraban Katy Perry y Orlando Bloom, y el estilista Derek Blasberg.

La cita fue en un racho de Wyoming, un lugar prefecto para localizar esta boda de inspiración 'cowboy'.

Notamos mucho la ausencia de su BBF Taylor Swift, dicen que por problemas de agenda... Ahora que ya se ha reconciliado con Katy, no se nos ocurre otra excusa mejor.

Los looks de la novia

Del vestidazo de Dior de la primera ceremonia, Karlie Kloss eligió para esta ocasión el denim para la toma de contacto con los invitados, y un vestido blanco de aire 'boho' para la cena, con escote 'Bardot', confeccionado en tejido de algodón troquelado, firmado por Jonathan Simkhai.

Para darlo todo en la pista de baile Karlie se cambió de vestido, con uno muy parecido al primero, de escote corazón y mangas abullonadas que dejaban sus hombros al aire. Aunque este, de tejido más vaporoso, tenía falda asimétrica, más corto por delante, dejando sus piernas al aire, permitiendole bailar con libertad, como hemos podido ver en uno de los stories de su gran amigo Derek, que ha compartido muchos momentos de la fiesta, haciéndonos partícipes del eventazo.

Aquí te dejamos con las instantáneas de esta boda tan original y divertida, en la que incluso los novios fueron elevados en volandas, en un homenaje a las raíces judías del novio, religión que Karlie adoptó meses antes de la primera boda, para poder casarse con Joshua y evitar las reticencias de su familia política.