Britney Spears aclara su situación real para apoyar el movimiento #FreeBritney

Hace poco más de un mes saltaba la noticia de queBritney Spears ingresaba voluntariamente en un centro psiquiátrico. Sin que nadie lo esperaba, después de su gran remonte desde aquel fatídico año 2007 en el que perdió el control de su vida por completo, la artista volvía a precisar ayuda para superar el trance por el que estaba pasando. Por aquel entonces ya había anunciado la cantante su retirada de los escenarios por el estado de salud en el que se encontraba su padre ya que tenía pensado centrarse en su mejora y recuperación.

Algo que, aunque ya habían pasado unos meses desde que le ocurrió porque parece que no había mejorado demasiado y seguía en un estado delicado, había mantenido en vilo a la princesa del pop y por tanto había decidido parar su carrera momentáneamente.

Sus fans enseguida crearon el movimiento para "liberarla" de todos sus problemas y quién les iba a decir ahora a sus seguidores que la propia artista se uniría a su hashtag #FreeBritney después de haber lanzado un vídeo hace unos días en el que decía que había decidido tomarse un descanso para pensar en ella misma.

Ha sido TMZ quien ha asegurado, por fuentes cercanas a Britney, que ella misma acudió a un juzgado a decir que su padre Jaime no solo la había obligado a medicarse sino que le había ingresado en un centro en contra de su voluntad. Una potestad que el padre tiene desde hace 11 años en calidad de procurador y ante la que se han revelado tanto ella como sus seguidores.

Britney reclama ahora más libertad y por eso le pidió al juez ciertos ajustes que no ha conseguido. De hecho, el juez no ha tomado ninguna medida aún más que ordenar a un experto que evalúe a la intérprete de cara a cambiar el régimen que tienen actualmente.

Toda una guerra familiar que no ha hecho más que empezar.

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