8 pasos para dejar tu pelo nutrido como si hubieras ido a la 'pelu'

Aprovecha los días libres y, con algunas cosas que tienes en casa, hazte un tratamiento capilar profesional

Chica en albornoz con toalla en la cabeza

Convierte tu baño en un 'spa' capilar

/ ISTOCK

En estos días de puente maravillosos en los que vas a disfrutar de mini-vacaciones o, al menos, vas a trabajar un día sí, un día no, quizá te apetezca vivir en casa un momento spa: Darte un buen baño, hacerte las manos con calma y quizá someter a tu agotada melena a un tratamiento capilar casero con intención de devolverle la vida, recuperando el brillo y obteniendo esa sedosidad que solo consigues cuando pasas por las manos de tu peluquero.

¿Cómo sería este tratamiento casero de nutrición capilar? Muy fácil y asequible, porque lo haces con lo que ya tienes en casa. Está previsto que tardes una media hora larga y que consigas dar esquinazo a tu pelo apagado, seco y sin fuerza.

El objetivo es aportar nutrición al pelo y sellar las puntas abiertas, de forma que se vea sano, brillante y con más cuerpo y fuerza. ¿Estás lista para hacer de tu baño o dormitorio un auténtico spa capilar? Apunta estos ocho pasos:

Paso 1: Reúne las herramientas

Te hará falta una mascarilla nutritiva, un aceite capilar, un pincel, un peine de fibra de carbono, papel de aluminio, plancha de pelo y sérum de puntas abiertas.

Paso 2: Prepara la pócima

En un cuenquito, pon la mascarilla y el aceite (las cantidades dependen del largo y espesor de tu melena; si es larga y espesa tres cucharadas de mascarilla y dos vaporizaciones de aceite), mezcla todo bien hasta que quede una textura homogénea.

Paso 3: Toma el pincel ¡y extiéndelo!

Es importante que el punto de partida sea un pelo limpio y un punto húmedo. La forma de aplicación para no liarla parda es dividir la melena en dos y atar la mitad superior en lo alto de la cabeza con una pinza. El resto del cabello lo divides en secciones y en cada sección, con ayuda de un pincel y apoyando el mechón en la palma de la mano, aplicas la mezcla de medios a puntas.

Paso 4: Pasa el peine

Pasa un peine de fibra de carbono por el mechón hasta desenredar el cabello por completo. Este tipo de peines no generan electricidad estática y evitan que el cabello se encrespe.

Paso 5: Coloca el papel de aluminio

Coge un trozo de papel de aluminio y coloca el mechón en el centro. Primero dobla un lado y luego el otro, hasta que el mechón esté totalmente cubierto. Con los dedos en forma de pinza, pásalos por encima del papel para fijar el producto. Repite el proceso en cada uno de los cinco mechones de la parte inferior del cabello. En la parte superior, haz la misma división, cinco mechones, y repite el proceso con cada uno de ellos.

Paso 6: Pasa la plancha

A una temperatura de 185 grados, pásala poco a poco por cada uno de los mechones envueltos, solo tres segundos sobre cada uno, empezando en la raíz.

Paso 7: Relájate

Mientras actúa, una media hora escasa, trata de disfrutar del momento. Después, retira el papel aluminio y aclara la melena en la ducha.

Paso 8: Acabado perfecto

Antes de secarlo al aire, aplica sérum de puntas.

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