¿Es Penélope Cruz o se trata de Audrey Hepburn?

Ha salido en todos los titulares: 'Una Audrey Hepburn del siglo XXI desembarca en el Festival de Venecia'. Mismo moño con idéntico flequillo, mismo maquillaje. No es una imitadora, se trata de, ni más ni menos, que nuestra Penélope Cruz.

No es esta la primera vez que la de Alcobendas emula a su actriz favorita. Todos recordamos la mítica portada que realizó para el setenta aniversario de la revista de cine más longeva de la historia, a la postre española, donde literalmente mutó en Holly Golightly, maquillaje y peluquería mediante.

Ya en esa ocasión se ruborizó ante los que las comparaban, dado que se trata de una de sus actrices favoritas de la historia del cine. “Es mi ídolo desde pequeña, en todos los sentidos”, declaró entonces. Y aclaró que, aunque no aspira a parecerse a ella, sí le gusta homenajearla con sus estilismos. En esta ocasión, homenaje o no, se ve clara la huella de Hepburn en el estilismo elegido anoche para posar en la alfombra roja de ‘The Eternal Daughter’, cinta escrita, producida y dirigida por Joanna Hogg y protagonizada por Tilda Swinton.

El look de Penélope Cruz en Venecia imitando a Audrey Hepburn

Analizando esta forma de arreglarse para el evento nadie se resiste a recordar la mítica escena en la que Audrey Hepburn se baja del taxi en plena Quinta Avenida neoyorkina y, croissant y café para llevar en mano, se queda embelesada en el escaparate de la joyería Tiffany’s.

Para llegar hasta esta imagen, que ha dado mil veces la vuelta al mundo, la actriz española recurrió a cuatro claves: el moño alto con gran volumen, el flequillo a lo baby bangs –totalmente postizo-, el eyeliner con un elegante rabillo y el vestido negro, esta vez con generoso escote.

El maquillaje de Penélope Cruz

Su ‘signature look’ empasta muy bien con lo propuesto por Hepburn en Desayuno con Diamantes: Un fondo de aspecto natural donde siempre destacan sus ojos y la luz de su piel. Poca sombra de ojos en tonos marrones y un delineado negro que, en esta ocasión, no va por ambas líneas (exterior y línea de agua), sino solo sobre las pestañas superiores y acabado en rabillo. Con el toque moderno de unas pestañas bien acentuadas pero flexibles, también toman mucha fuerza las cejas, bien destacadas.

En los labios un suave toque de labial con el detalle que más gusta y favorece a Pe: Siempre bien perfilados con la técnica 'overlip' y rellenados con un tono nude muy natural que le favorece enormemente. ¿El truco final? Un poco de brillo transparente en el centro del labio.

El flequillo postizo

Acompañando a ese moño que hizo famosa la cinta basada en la novela de Truman Capote, conocido como beehive (colmena de abejas), un flequillo mini también inspirado en el peinado de la actriz. Absolutamente postizo pero colocado con maestría, si te gusta y quieres emularlo, atenta: “Caras ovaladas como la de Penélope se pueden permitir este estilo de flequillo ‘garçon’ ligeramente ladeado que es capaz de quitarle hojas al calendario en un abrir y cerrar de ojos”, apunta Bea Guerrero, CEO de Ángela Navarro.

Estos postizos son apliques de pelo natural o sintético (o mezcla de ambos) que incorpora unas pequeñas pinzas ocultas que, una vez colocadas, son totalmente invisibles. Vienen muy largos para que puedas adaptarlo a las medidas de tu rostro y cuando están elaborados con cabello natural se pueden teñir y rizar.

Comprar un flequillo postizo bueno

Este de Easilocks X Jordyn Woods se puede peinar con calor de hasta 150 °C. Lo venden en varios colores. Se puede usar tal cual o llevarlo a la peluquería a recortarlo a tu estilo. Es sintético pero se puede tratar como natural.